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 Un joven arquitecto enfermo de SIDA lleva una vida normal y hasta cierto punto agradable, hasta que le diagnostican una lesión cerebral que le matará rapidamente. Decide organizar una fiesta de despedida, a la que invitará a sus amigos y parientes; todo en ella resulta engañoso: la apariencia del enfermo, la actitud de los invitados, el reencuentro del protagonista con su antiguo amante... Porque al fin la eutanasia será el cobarde final, otra forma más de volver la cara, de olvidar —como pretenden los personajes en el party— lo trágico de la vida.
Sobre un buen guión, muy trabajado, basado en un hecho real, el director despierta la sensibilidad y el interés del espectador.
Director: Randall Kleiser.
Intérpretes: Eric Roberts (Nick Stark), Gregory Harrison (Brandon Theis), Marlee Matlin (Daphne Stark), Margaret Cho (Charlene Lee), Lee Grant (Amalia Stark), Bronson Pinchot (Monty Tipton), Olivia Newton-John (Lina Bingham), Bruce Davison (Rodney Bringham).
País: Estados Unidos. Año: 1996.
Producción: Randall Kleiser y Joel Thurm, para Opala.
Presentada por: United Artists Pictures.
Guión: Randall Kleiser.
Música: Basil Poledouris. B.S.O.: Varèse Sarabande.
Fotografía: Bernd Heinl. Dirección artística: Clark Hunter.
Montaje: Ilya Von Hasperg.
Duración: 106 minutos.
Género: Drama.
Público apropiado: Adultos. Contenidos espécificos: X.
Anécdotas
* La película está basada en hechos reales. La ex pareja del director, el arquitecto Harry Stein, decidió poner fin a su vida de la misma manera en 1992. |
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